"Vamos a defender nuestros intereses", declaró Putin al reunirse con los directores de varias agencias de noticias extranjeras en un evento paralelo al Foro Económico de San Petersburgo.
El mandatario aclaró que Moscú no reconoce la jurisdicción de la Corte de Arbitraje de La Haya cuyas competencias se extienden únicamente a los países que ratificaron la Carta Europea de la Energía.
"Rusia no ha ratificado la Carta, así que no reconocemos la jurisdicción de esa instancia judicial", dijo.
No es la primera vez que "accionistas de Yukos tratan de obtener de Rusia recursos extra", recordó el mandatario y agregó que el Estado defenderá sus intereses "en el marco de un proceso legal civilizado".
Bélgica y Francia embargaron esta semana los bienes del Gobierno ruso en su territorio por una demanda que presentó un grupo de antiguos accionistas de la petrolera Yukos.
El ministro de Economía de Rusia, Alexéi Uluikáev, declaró que los embargos de bienes son ilegales y Rusia presentará una apelación. Por su parte, los titulares de Justicia y Exteriores, Alexandr Konoválov y Serguéi Lavrov, advirtieron de que Moscú respondería de forma simétrica.
La Corte Permanente de Arbitraje de La Haya dictaminó el pasado 18 de julio de 2014 que Rusia debía pagar una compensación de 50.000 millones de dólares a los tres querellantes: las compañías Hulley Enterprises, Yukos Universal Limited y Veteran Petroleum Ltd.
En 2003, las autoridades rusas imputaron evasión fiscal y otros delitos económicos a los dueños de la entonces mayor petrolera del país, entre ellos el magnate Mijaíl Jodorkovski.
Posteriormente Yukos se declaró en quiebra y sus activos fueron adquiridos por la empresa pública Rosneft.