Esta es una de las conclusiones del último barómetro del Real Instituto Elcano (BRIE), presentado hoy en Madrid, muy centrado esta vez en temas internacionales.
Así el 59% de los españoles opinan que el Gobierno ruso y los milicianos a los que apoya son los responsables del estallido de la guerra en el Este de Ucrania, frente a un 20% que no sabe o no contesta.
Sólo el 10% de los españoles apoya las sanciones que la Unión Europea contra Rusia, frente al 55% que opina que el papel de Europa frente a esta crisis es la de la medicación.
La encuesta revela también que los españoles se alinean con los ciudadanos de los países del Sur de Europa, incluyendo a Francia, en su tratamiento “blando” de la deuda externa griega, y en este aspecto están muy lejanos de las opiniones públicas alemana, finlandesa o de varios otros países del centro y norte de Europa que reclaman contundencia en las relaciones financieras con Grecia.
A diferencia de ellos, el 65% de los encuestados son favorables a esperar a que la situación económica griega mejore para reclamar la parte que corresponde a España en el pago de esa deuda.
Menos de la quinta parte de los entrevistados cree que el Gobierno de Mariano Rajoy debe presionar a Grecia para que pague ya su deuda (19%).
El trabajo de campo se ha realizado del día 21 de Abril al 5 de Mayo del 2015 entrevistando a unas mil personas.
La encuesta indica que combatir el terrorismo yihadista debería ser la prioridad para la política exterior española, en opinión de los entrevistados, que le otorgan un 8,4 en una escala de 0 a 10.
Como ya ocurría en el 2014, invertir en ayuda en países en desarrollo es el objetivo menos valorado, aunque la diferencia es pequeña, con sólo 1,1 puntos respecto al más valorado.
Algo más de la mitad de los españoles (55%) cree que España debería participar en operaciones militares internacionales contra el llamado Estado Islámico, frente al 32%.
Ese porcentaje, es considerablemente más bajo que el 87% que califica al Estado Islámico como una amenaza importante o muy importante. Los hombres, las personas mayores, los universitarios y la derecha apoyan más claramente esa intervención. La izquierda está dividida al respecto en dos partes casi iguales.
Respecto a la nueva situación de Cuba, las opiniones están muy divididas, domina la de los que creen que Cuba se convertirá en los próximos años en un país democrático con una economía de mercado.
Hay que destacar que sólo un 10% no tiene opinión, lo que muestra que este es un tema que interesa a los españoles, ligados por lazos históricos, turísticos y afectivos a ese país.
Las expectativas de que Cuba se convierta en una democracia y una economía de mercado son mayores entre la izquierda que entre la derecha, con una distribución de opiniones perfectamente contraria.
En la valoración de países que hacen los españoles, Venezuela es el peor valorado.