"Esto se refiere también a Austria, todas las partes participantes deben aprovechar su influencia en los bandos enfrentados en el este de Ucrania para poner en práctica lo antes posible los acuerdos de Minsk", dijo el embajador en una entrevista con RIA Novosti.
El diplomático destacó que se trata de la resolución pacífica del conflicto y por eso "las sanciones no son un objetivo, sino un medio para lograr esta resolución".
La UE, indicó Brix, llegó a la conclusión de que el cumplimiento total de los acuerdos de Minsk es una condición para levantar las sanciones.
En la cumbre de los jefes de Estado de la UE a finales de marzo se tomó la decisión de condicionar las sanciones económicas contra Rusia a la aplicación completa de los acuerdos de Minsk lo que supuestamente va a durar hasta el 31 de diciembre de 2015.
Actualmente se debate la necesidad de prolongar las restricciones que expiran el 31 de julio por lo que se necesita aprobar un acta legislativa que lo fije.
Las relaciones entre Moscú y Occidente empeoraron a raíz de la crisis en Ucrania y, en particular, tras la adhesión de Crimea a Rusia en marzo de 2014, que los países occidentales califican de "anexión ilegal".
EEUU y la UE aprobaron varios paquetes de sanciones contra Moscú, a los que Rusia respondió en agosto de 2014 con el embargo de algunas importaciones alimenticias de EEUU, la UE, Australia, Canadá y Noruega.