En esta región, la Guardia Costera rusa se encarga de "garantizar la seguridad, en particular de las instalaciones petroleras y vigilar el cumplimiento del régimen de navegación en la zona de la Ruta Marítima del Norte", señaló.
"A este fin, se han formado nuevas direcciones fronterizas del FSB para las zonas árticas oeste y este, situadas en Múrmansk y Petropávlosk-Kamchatski, respectivamente", informó Alexéev.
En esta última ciudad, capital de la península de Kamchatka, se creará además una gran base naval, agregó; también se instalarán un puesto de vigilancia en la isla de Wrangel y otros siete a lo largo de la Ruta Marítima del Norte.
Y es que, según el almirante Alexéev, el ámbito de actuación de la Guardia Costera no se limita actualmente a las aguas bajo jurisdicción de Rusia, sino que abarca "la zona del archipiélago Svalbard, en el Ártico, las comunicaciones marítimas del Báltico, el mar de Azov y el Caspio, aguas del mar Negro frente a la costa de Abjasia, así como zonas de pesca en el Pacífico".
Para garantizar la presencia de sus guardacostas en todas esas regiones, Rusia está construyendo ahora un "número sin precedentes" de buques costeros, entre los que destaca el primer patrullero rompehielos diseñado para misiones en el Ártico.