"La prioridad del SNP es acabar con la austeridad y el daño que causa en las vidas de la población, mientras que la prioridad del Gobierno 'tory' es acabar con los derechos humanos y las oportunidades de justicia", declaró.
En su primer discurso, Sturgeon prometió una fuerte oposición a la "escala y velocidad de las reducciones" en el gasto público del programa conservador, que incluyen recortes por valor de 12.000 millones de libras (cerca de 17.000 millones de euros) en subsidios sociales para el ejercicio 2017-2018.
Los independentistas escoceses, que conforman el tercer grupo parlamentario en Westminster en la presente legislatura, introducirán enmiendas al proyecto de ley del referéndum sobre la continuidad o salida de la Unión Europea, popularmente conocido como 'Brexit'.
Sturgeon aboga por una "mayoría doble" en el referéndum de forma que la salida de la UE "solo sea posible si están de acuerdo las cuatro naciones del Reino Unido", esto es, Escocia, Gales e Irlanda del Norte, además de Inglaterra.
"Debemos asegurarnos de que Escocia no sea forzada a salir de la UE en contra de su voluntad", recalcó la líder independentista en su discurso en el estadio de fútbol de Tynecastle, en Edimburgo.
El electorado escocés siempre ha defendido la permanencia dentro de la UE, incluso en el supuesto de una trayectoria independiente del resto de Reino Unido, precisó.
La abolición de la Legislación en Derechos Humanos es otra 'línea roja' que el Gobierno cruzó, sobre la que hoy incidió Sturgeon.
Cameron ha prometido sustituir la ley vigente, que incorpora la Convención Europea de Derechos Humanos, por una legislación sobre "los derechos británicos".
"Eliminar la Ley de Derechos Humanos sería un paso retrogrado y alarmante", denunció hoy Sturgeon.
La abolición de esta legislación tendrá graves consecuencias en Escocia e Irlanda del Norte y puede desembocar en la expulsión de Reino Unido del Consejo de Europa, según alertan expertos en derecho internacional.