"Por tratarse de Irán, las autoridades estadounidenses decidieron que los nuevos cazas F-35 y las bombas serían una buena compensación", dijo a Sputnik.
Kedmi señaló que al negociar con los países árabes e islámicos, EEUU siempre trata de apaciguar a Israel suministrándole armas a modo de recompensa.
Según el experto, al autorizar el suministro de armas, EEUU no solo trata de calmar a Israel sino también aprovecha la situación para impulsar su propia industria y además recibirá pagos por ofrecer labores de mantenimiento del armamento que le vende.
La Agencia de Cooperación de Seguridad de Defensa del Pentágono anunció el martes la venta de armas y equipos de orientación a Israel por valor de 1.870 millones de dólares, que luego fue aprobada por el Departamento de Estado.