"Durante mi estancia en Bruselas he sostenido encuentros con el secretario general de Consejo Europeo, (Thorbjorn) Jagland, y la alta representante, Federica Mogherini, con quien discutimos tanto la crisis ucraniana como la deplorable situación de las relaciones entre Rusia y la UE, causada por el cierre de todos los canales y mecanismos de interacción llevado a cabo por Bruselas. Existen ciertos avances al respecto", señaló el ministro de Exteriores ruso.
"Queremos que los procesos que se desarrollan entre la UE y los países que desean profundizar sus relaciones económicas, humanitarias y de otros tipos con la Unión no las forjen en perjuicio de los intereses de Rusia", dijo el titular ruso al comentar su opinión sobre la Cumbre de la Asociación Oriental.
La Cumbre de la Asociación Oriental, que contará con participación de Armenia, Azerbaiyán, Bielorrusia, Georgia, Moldavia y Ucrania, se celebrará el 21 y el 22 de mayo en Riga, la capital de Letonia.
Los jefes de Estado y de Gobierno evaluarán el avance de las relaciones entre la UE y sus socios orientales desde la última cumbre, celebrada en Vilna en 2013.
Por su parte, la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, aseguró a Lavrov que la cooperación de la UE con los países de la Asociación Oriental no se desarrollará en detrimento de Rusia, según anunció el canciller, añadiendo que esas relaciones deben tomar en cuenta los procesos integracionistas en el este de Europa, y deben tratar de ponerlos en armonía en lugar de hacerles frente.
"Desgraciadamente, tiene lugar un rechazo, mientras el intento de mostrar la situación como algo que no tiene alternativa, como un juego con un resultado de cero conduce a un desenlace indeseado, desfavorable", destacó el titular ruso.
El ministro subrayó que las palabras de Mogherini son correctas, pero sería deseable "que se reforzaran con acciones concretas".