El expresidente junto con otras 105 personas estaba acusado de revelar secretos de Estado, informó la cadena televisiva Al Jazeera.
A Mursi y sus allegados les imputaban haber entregado a la Inteligencia de Catar unos documentos clasificados relacionados con la defensa y la seguridad del Estado.
Sin embargo, según la ley egipcia, la condena a muerte debe ser confirmada por el Gran Muftí.
Se espera que la sentencia definitiva se conozca el próximo 2 de junio.
En abril pasado, Mursi y sus 14 partidarios fueron condenados a 20 años de prisión por haber incitado el asesinato de manifestantes pacíficos durante los desórdenes que estallaron en diciembre de 2012 cerca de la residencia del jefe de Estado.
Mursi, el primer presidente de Egipto que ganó unas elecciones libres, fue destituido en julio de 2013 por un golpe militar liderado por el general Al Sisi, ahora presidente.
El golpe se produjo después de que se llevaran a cabo protestas masivas en la calle que exigían la dimisión del islamista Mursi.