"Del presupuesto federal se asignan 205,2 millones de rublos para reanudar el envío de expediciones científicas al Ártico (…) con el fin de potenciar el uso de sus recursos minerales y proteger su entorno natural", se señala.
También se indica que la estación Polo Norte es un importantísimo instrumento para garantizar la presencia rusa en las altitudes altas del Ártico y su rol preponderante en su exploración.
En 2013 se decidió evacuar la estación científica rusa Polo Norte 40 instalada en un témpano de hielo que empezó a derretirse.
La nueva estación rusa, Polo Norte-41 inaugurada el 19 de abril, a diferencia de las anteriores no funcionara durante todo el año sino por temporadas.


