"Estamos trabajando para lograr un México de paz y de tranquilidad que deseamos para la sociedad mexicana", dijo el mandatario ante Klaus Schwab, fundador y presidente del Foro Económico Mundial, y los presidentes de Panamá, Juan Carlos Varela, de Haití, Michel Martelly, y decenas de altos funcionario de finanzas y empresarios de la región.
Peña admitió que es un gran reto para México, como lo tiene cualquier otra nación del mundo en esa materia de seguridad, en la cual "estamos avanzando, aun cuando no estamos satisfechos, ni tampoco echamos campanas al vuelo para decir que ya lo logramos".
"Ésta no es una tarea sólo del Gobierno de la República, es una tarea de todos los órdenes de Gobierno para combatir la inseguridad, pero estamos avanzando", dijo el mandatario mexicano.
En México hay ahora menos violencia y menor número de homicidios aseguró, y destacó que "hay regiones de nuestro territorio que hasta hace apenas unos años vivían escenarios de gran violencia, y que hoy tienen un escenario muy diferente".
El Presidente puso como ejemplos "visibles e ilustrativos", citó los casos de Ciudad Juárez, en el estado de Chihuahua, fronterizo con EEUU, y la zona metropolitana de Monterrey.
Sin embargo, la atención en las fechas recientes se ha centrado en tres estados asolados por la violencia: Guerrero, en el sur del país, Jalisco y Michoacán, en el centro-oeste.
Peña Nieto defendió la agenda de reformas estructurales encabezadas por la apertura energética "que derriba barreras, pone a la vanguardia un ámbito fundamental de nuestra vida social y económica, y nos permitirán ser una nación más próspera e incluyente".
En América Latina hay un ánimo de transformación y modernidad para impulsar el crecimiento económico y el desarrollo de las sociedades de la región –afirmó el mandatario–, y puso como ejemplo que el Foro Económico Mundial proponga como tema central, avanzar a través de una agenda de renovación.
Klaus Schwab, Fundador y Presidente Ejecutivo del Foro Económico Mundial, reconoció el trabajo de Peña para erradicar la corrupción, y celebró "su compromiso por establecer este nuevo encuadre mental que es importante para reformar una sociedad; no debemos olvidar que es un problema global, un problema a nivel mundial".
En cuanto al problema del crimen organizado Schwab dijo que "el problema de la criminalidad no es un problema mexicano, es del mundo".
El líder global instó al mandatario a "seguir luchando contra este flagelo" y le expreso su solidaridad "para que esta lucha tenga consecuencias positivas".