El jefe de Roscosmos dijo que los ingenieros controlan los sistemas del carguero y examinan las variantes para hundir la nave.
"Controlamos la órbita de la nave e iremos informando de todos los acontecimientos", dijo.
Komarov reconoció que "la nave de carga no puede continuar su vuelo ni acoplarse de forma segura a la EEI" (Estación Espacial Internacional).
El Progress-M27M debía llevar a la plataforma orbital más de dos toneladas y media de diversas cargas, entre ellas combustible, oxígeno, alimentos, equipos para experimentos científicos
El lanzamiento transcurrió con normalidad pero poco antes de que la nave se separara de la tercera etapa del cohete resultó que, por una serie de fallos que la investigación en curso aún debe identificar, el carguero no envía los datos telemétricos a las estaciones terrestres.