“Son incuestionables y merecen el reconocimiento las enormes pérdidas humanas y materiales de los aliados, especialmente de la URSS, que sufrieron para la defensa contra Adolf Hitler y, en particular, para liberar Viena”, dijo el mandatario precisando que “solo en el combate por Viena fallecieron más de 18.000 soldados soviéticos”.
Fischer añadió que “por eso el 8 de mayo depositaré con honores militares una ofrenda floral sobre la tumba a los soldados soviéticos en el Cementerio central de Viena, para expresar respeto a estas víctimas y mostrar que no se les olvida”.
Según el mandatario, “el hecho de que los honores se rindan en Viena y no en el marco del desfile militar en Moscú no disminuye nuestro agradecimiento”.
Anteriormente se informó que el presidente de Austria no acudirá al Desfile de Victoria que tendrá lugar el 9 mayo en Moscú, ceremonia en la que participará el embajador ruso en Austria.