“Rusia está preocupada por la reacción negativa de varios países a los resultados de negociaciones del ‘sexteto’ e Irán en Lausana y por ‘el ataque masivo’ a los acuerdos alcanzados”, dijo.
Riabkov precisó que cuando se trata del proceso tan “complicado y frágil”, la presión de algunos países puede resultar muy destructiva.
El 2 de abril en la ciudad suiza de Lausana Irán y el Grupo 5+1 (China, EEUU, Francia, Reino Unido y Rusia más Alemania) pactaron suspender por 10 años dos tercios de las capacidades de enriquecimiento de uranio con la que cuenta actualmente la República Islámica.
Además, el programa de enriquecimiento será supervisado por un periodo de hasta 25 años.
A cambio, el acuerdo contempla el levantamiento de las sanciones nucleares impuestas por EEUU y la Unión Europea contra Irán.