“Decimos a los sureños que no somos invasores y estamos dispuestos a cooperar con ellos y sus líderes para vencer Al Qaeda y los agresores extranjeros”, dijo a la cadena libanesa Al Mayadin.
Antes de la operación coalicionista, agregó, las partes del conflicto yemení estaban dialogando y hubo una posibilidad de resolverlo pacíficamente.
Yemen está desgarrado por un conflicto interno que ha provocado ya la intervención militar extranjera.
En el sur del país actúa el grupo 'Al Qaeda en la Península Arábiga', mientras que su centro acoge los choques entre las tropas leales al presidente Abdo Rabbu Mansur Hadi y las fuerzas que apoyan a los rebeldes hutíes.
Desde finales de marzo, la coalición militar de países del Golfo Pérsico y de África del Norte, liderada por Arabia Saudí, lleva a cabo una operación militar en Yemen contra los rebeldes hutíes del movimiento Ansar Alá, que controlan la mayor parte del país árabe, incluida su capital, Saná.