Las detenciones las han llevado a cabo conjuntamente el Ejército israelí, la policía y los servicios secretos del Shin Bet.
Según los servicios de seguridad, las detenciones se han efectuado en respuesta a un aumento de la actividad de Hamás en Nablus, que pretendía llevar a cabo ataques contra Israel.
Los sospechosos "han sido financiados y dirigidos por una célula de Hamás en el extranjero, se los ha arrestado para interrogarlos", ha indicado el Shin Bet.
Los miembros de la célula —de la ciudad de Abu Dis, cerca de Jerusalén- compraron un vehículo y se entrenaron con armas de fuego, además de recopilar información sobre posibles objetivos, aseguró el Shin Bet.
Uno de los detenidos en marzo es Ma'an Saar, presunto jefe de la célula, nacido en la aldea cisjordana de Burka y que trabajaba en la cafetería de la Universidad de Abu Dis.