"Desde el punto de vista económico la nueva estructura es más viable y conveniente", ha asegurado también el experto al intervenir en la conferencia titulada "Europa y Eurasia: vías hacia un nuevo modelo de seguridad energética".
Además ha recalcado que el Turk Stream favorece a todos.
"Europa seguiría recibiendo gas ruso, Turquía elevaría su importancia estratégica y Rusia no perdería a sus clientes europeos", ha destacado.
En diciembre pasado Moscú canceló el proyecto South Stream debido a que Bruselas expresaba una posición poco constructiva.
La ruta planeada pasaba por el fondo del mar Negro hasta Bulgaria y de ahí a los países balcánicos, Hungría, Austria e Italia.
Como alternativa se propuso el gasoducto Turk Stream que prevé el tendido de una tubería de Rusia a Turquía y la construcción en la frontera con Grecia de un depósito de gas para los consumidores del sur de Europa, que tendrán que crear una infraestructura de transporte de combustible en su territorio.