"Ha sido todo un éxito, recaudaremos miles de euros para financiar la caravana antifascista y llevar ayuda humanitaria al este de Ucrania", aseguró en declaraciones a Sputnik Nóvosti Irene H, miembro de la Brigada Rubén Ruiz Ibárruri, que organiza el concierto.
Todas las entradas se agotaron horas antes de que comenzara el acto, incluso decenas de personas se tuvieron que quedar a las puertas del concierto, celebrado en un centro social del barrio de Vallecas en Madrid.
La Brigada colabora con la iniciativa puesta en marcha el pasado mes de mayo por la banda italiana tras las masacres contra civiles en Odessa y Mariúpol por parte de militares y ultras ucranianos.
El objetivo de esta iniciativa es viajar en mayo al este de Ucrania y difundir la trágica situación que vive la población en el Donbás.
"Llevaremos ayuda humanitaria y ayudaremos en todo lo que podamos durante los seis días que estaremos en Donbás. Son víctimas de una guerra injusta", aseguró David Cacchione, miembro de Banda Bassotti, en declaraciones a Sputnik.
Según Cacchione, España es, junto a Italia, uno de los puntos clave en esta caravana, aunque en mayo llegarán a Lugansk voluntarios y activistas de todo el mundo.
Además de italianos y españoles, irán al este de Ucrania antifascistas de Argentina, Alemania, Estados Unidos, China o Perú, entre otros.
"Es una caravana política y humanitaria que hemos sacado adelante sin ninguna ayuda, es más, las instituciones nos ponen trabas", explicó Irene H a esta agencia.
En el concierto, además de la banda italiana, subieron al escenario los grupos "Kaos Urbano", "Suzio 13" y "Hazte Caso Primo".
En las semanas previas al acto había el temor de que se cancelase por orden del Ayuntamiento de Madrid y la Delegación del Gobierno, como ocurrió con varios conciertos similares
Precisamente, otro de los objetivos de este acto era "acabar con la censura en Madrid", por lo que antes del concierto se realizó una protesta.
"La censura política se ha cebado con grupos como Soziedad Alcohólika, DefconDos, Fermín Muguruza o la propia Banda Bassotti. Queremos acabar con esta censura en las actividades culturales, queremos una ciudad integradora donde la libertad de expresión y el derecho a la cultura popular sea una realidad y no un deseo", aseguraron los organizadores.