Esta subida representa el peor resultado intermensual desde febrero de 2003 y la peor alza en un mes de mayo desde 1995, es decir, su peor resultado en dos décadas lo que supone una situación alarmante que se ha visto motivada por la fuerte subida del dólar y el ajuste de los precios de la electricidad en el último mes.
El acumulado en los últimos 12 meses asciende al 8,13%, mientras que las proyecciones más recientes del Banco Central situaron la inflación en 2015 en torno al 8,2%, por tanto, resulta muy posible que la entidad tenga que volver a aumentar sus expectativas de inflación la próxima semana y se descarta plenamente alcanzar el 6,5% en el que se sitúa el límite teórico aceptable para Brasil.