Lavrov insistió también en la necesidad de crear en Yemen un Gobierno de consenso nacional y preparar nuevas elecciones.
Para lograr el diálogo "los hutíes deben parar su operación en el sur de Yemen donde se desarrollan intensas acciones militares y se están conquistando nuevos territorios" mientras que la coalición y los que luchan contra los insurgentes en tierra deben cesar el fuego y los golpes aéreos.
Según Lavrov, la operación de la coalición internacional en contra de los hutíes en Yemen carece de base legal y debería haber sido precedida de consultas en el Consejo de Seguridad de la ONU.
El ministro opinó que la situación en Yemen preocupa puesto que está creando una nueva ruptura entre los chiíes y los suníes.
"Toda la situación geopolítica en la región del Golfo Pérsico gira en torno a este enfrentamiento", recordó.
Desde hace más de una semana, la coalición militar de países del Golfo Pérsico y de África del Norte, liderada por Arabia Saudí, lleva a cabo una operación militar en Yemen contra los rebeldes hutíes del movimiento Ansar Alá, que controlan la mayor parte del país árabe, incluida su capital, Saná.
La ofensiva busca restaurar al presidente Abdo Rabu Mansur Hadi y a su Gobierno derrocados por los hutíes.