“Las posibilidades (de éxito) de esta ronda de negociaciones no son malas, diría incluso que son buenas”, dijo el jefe de la diplomacia rusa antes de partir a Lausana.
Lavrov explicó que volverá a la localidad suiza para tomar parte en la sesión final de cancilleres del sexteto de los negociadores.
Asimismo, reiteró la postura rusa en las negociaciones, que consiste en que una vez las partes lleguen a un acuerdo se deben levantar las sanciones contra Irán.
"Las sanciones deben perder vigencia y dejar de ser un obstáculo para el desarrollo de lazos económico-comerciales de Irán con sus socios extranjeros", explicó.
Lavrov precisó que se refiere a las restricciones impuestas contra Irán por el Consejo de Seguridad de la ONU.
"Las sanciones unilaterales de EEUU y algunos países europeos no las consideramos legítimas en ningún caso, sean contra Irán o cualquier otro Estado", señaló.
Al mismo tiempo, Lavrov indicó que de eso ya tiene que ocuparse directamente Teherán.
El pasado 26 de marzo comenzó en la ciudad suiza una nueva ronda de conversaciones entre Irán y el sexteto integrado por EEUU, China, Gran Bretaña, Francia y Rusia más Alemania.
Las partes llevan a cabo conversaciones diplomáticas para llegar a un acuerdo político para finales de marzo y a un acuerdo general antes de fines de junio.
Las consultas se interrumpieron el lunes para reanudarse esta mañana.
Según un portavoz de la Cancillería iraní, la posibilidad de prolongar las consultas del Grupo 5+1 con Irán en Lausana más allá del 31 de marzo no figura en la agenda de los negociadores.