"La operación militar en Yemen continuará hasta que los hutíes se retiren de todas las ciudades que han ocupado y depongan las armas", dice el texto de la declaración final de la cumbre de la LEA que leyó Al Arabi.
Arabia Saudí y las monarquías árabes del Golfo Pérsico lanzaron la noche del jueves una operación militar en Yemen que comenzó inmediatamente después de que el Consejo de Cooperación de los Estados del Golfo emitiera una declaración señalando que Arabia Saudí, Kuwait, Bahréin, Emiratos Árabes y Catar aceptan la solicitud del presidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi, y defenderán al Gobierno legítimo de los insurgentes hutíes.
Jordania, Egipto y Sudán también anunciaron que se unen a la coalición.
La aviación de la coalición bombardeó el aeropuerto de Saná y varias instalaciones militares, con un saldo de decenas de muertos.