La declaración se emitió al cierre de una reunión entre el viceministro ruso de Exteriores para Asuntos Árabes y Africanos, Mijaíl Bogdánov; su homólogo yemení, Riyad Yasin, y el jefe del Gabinete del presidente de Yemen, Ahmed Avad ben Mubarak, la que se celebró en los pasillos de la cumbre de la Liga de los Estados Árabes que sesiona en Sharm el Sheikh.
"La parte rusa ha expresado mucha preocupación con motivo de los últimos sucesos en Yemen, volviendo a instar a todos los involucrados en el conflicto a que renuncien a las operaciones de combate en aras de conservar la unidad, la soberanía y la integridad territorial de la República de Yemen y entablen un amplio diálogo con participación de todas las fuerzas políticas y religiosas del país", dice un comunicado publicado en la web de la Cancillería rusa.
Arabia Saudí y las monarquías árabes del Golfo Pérsico lanzaron la noche del jueves una operación militar en Yemen que comenzó inmediatamente después de que el Consejo de Cooperación de los Estados del Golfo emitiera una declaración señalando que Arabia Saudí, Kuwait, Bahréin, Emiratos Árabes y Catar aceptan la solicitud del presidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi, y defenderán al Gobierno legítimo de los insurgentes hutíes.
Jordania, Egipto, Sudán y Turquía también anunciaron que se unen a la coalición.
La aviación de la coalición bombardeó el aeropuerto de Saná y varias instalaciones militares, con un saldo de decenas de muertos.