“Estamos a punto de tomar una decisión política y de un impulso colectivo político”, destacó.
Indicó que actualmente los participantes del evento abordan los temas más complicados del programa nuclear iraní que son “las sanciones, el enriquecimiento (del uranio) en Irán y el futuro de las instalaciones de Fordow”.
Ryabkov subrayó que las negociaciones “tienen una intensidad máxima, no hay pausas o ningún modo de apartarse del proceso de negociaciones”.
“Esto demuestra que hay bastante voluntad política para conseguir un resultado conveniente para todos pero no hay decisiones a favor de este resultado”, dijo.
Al mismo tiempo, el vicecanciller recordó que la fecha límite es el 30 de junio y expresó la esperanza de que hasta entonces las partes puedan conseguir un acuerdo.
“Si no se alcanza un acuerdo ahora, no es un motivo para revisar todo el sistema de negociaciones (…) sería imperdonable perder todos los avances”, dijo, al agregar que califica las posibilidades de llegar a un consenso como “considerablemente mayores que el 50%”.
El Grupo 5+1 (formado por Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Alemania, Rusia y China) e Irán buscan superar divergencias y elaborar un acuerdo general que garantice el carácter exclusivamente pacífico del programa nuclear iraní a cambio de un levantamiento paulatino de las sanciones.
Esperan poder lograr un acuerdo definitivo para junio.
El 26 de marzo las delegaciones del G5+1 e Irán comenzaron en la ciudad suiza de Lausana el intento más actual para elaborar la parte política del acuerdo sobre el programa nuclear iraní.