"La interpretación más plausible y fidedigna es que el copiloto por una decisión voluntaria se negase a abrir la puerta de la cabina de pilotos al comandante y presionase el botón que provoca la pérdida de altura", explicó al precisar que pese a que los actos del copiloto podrían calificarse de "intención de destruir ese avión".
En las grabaciones del registrador de vuelo se oyen intentos de tirar la puerta abajo, llamadas que realizaba el controlador aéreo y las advertencias de los sistemas del avión sobre la probabilidad de un impacto.
El fiscal aseguró igualmente que los pasajeros, en su opinión, se dieron cuenta de lo que estaba sucediendo en el último momento porque empezaron a gritar justo antes del impacto.
Al mismo tiempo indicó que de momento nada indica que se trate de un atentado terrorista.
El Airbus A320 de la compañía alemana de bajo coste Germanwings, filial de Lufthansa, que cubría la ruta de Barcelona a Düsseldorf se estrelló el martes en una zona de difícil acceso en los Alpes, en el sur de Francia.
Según los últimos datos, en el siniestro fallecieron 150 personas, la mayoría alemanes y españoles.