En opinión de los militares estadounidenses, la mayor amenaza para EEUU en el ciberespacio proviene de Rusia, China, Irán y Corea del Norte.
"No podemos ir a la zaga del enemigo dispuesto a robar nuestra propiedad intelectual y cometer actos de sabotaje contra nuestras redes", indicó Rogers al agregar que hay "poca esperanza de que el adversario se muestre responsable en el ciberespacio".
Moscú ha reaccionado con cautela ante estas declaraciones. Expertos citados por el periódico Kommersant coinciden en que el nuevo sistema de disuasión de EEUU provocaría una carrera armamentística.
"La mayoría de los países, incluida Rusia, procuran evitar los enfrentamientos en el ciberespacio, pero Estados Unidos, en cambio, promueve una carrera de armamento en este terreno", dijo al diario una fuente cercana al Kremlin.
Rusia y EEUU habían firmado en 2013 acuerdos sobre medidas de confianza en el ciberespacio considerados un pacto de no agresión cibernética.
Se trata de un paquete de tres acuerdos intergubernamentales suscritos por los presidentes Vladímir Putin y Barack Obama en los pasillos de la cumbre del G8 en Lough Erne, Irlanda del Norte.
La fuente citada comentó a Kommersant que recientemente EEUU "ha enviado una señal" sobre el deseo de reanudar las consultas bilaterales sobre la seguridad cibernética.