"La ayuda está destinada para comprar equipamiento médico japonés", dijo Kishida en una rueda de prensa.
A finales de febrero, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Japón anunció la intención de otorgar seis millones de dólares en ayuda humanitaria a los refugiados en Siria que sufrieron la actividad del EI.
Se prevé que el dinero se use para el abastecimiento de alimentos, mantas y estufas a los refugiados y desplazados forzosos de la zona de combates.
En enero, durante su visita a los países de Oriente Próximo, Abe comunicó una donación de 200 millones de dólares destinados a prestar ayuda a los países de la región en su lucha contra el EI.
Además declaró que Japón planea enviar otros 2.500 millones de dólares para el desarrollo de infraestructuras.
El grupo Estado Islámico, que cuenta con unos 30.000 miembros según la CIA, intenta extender su dominio desde el califato que estableció en amplios territorios de Siria e Irak.
Además de la coalición internacional encabezada por EEUU que realiza ataques aéreos contra sus posiciones, el EI es combatido por las tropas gubernamentales de Irak y Siria, así como por los grupos armados kurdos de ambos países.