26 de enero 2015, 18:03 GMT
Hasta el momento, ya ha dispensado a la mitad, 300, lo que representa el 70% del área operacional de la empresa, donde actúan los trabajadores que reparan escapes en las redes de aguas y cloacas.
"Los despidos son claramente una política de economía de la empresa que va a empeorar el trato a la población. ¿Cómo combates una crisis hídrica de esas proporciones echando a la mano de obra? Son funcionarios que hacen la manutención de la red y trabajan para evitar el desperdicio de agua", advirtió el presidente del Sindicato de los Trabajadores del Agua, Rene Vicente dos Santos, en declaraciones al diario Estado de Sao Paulo.
La principal reserva de agua de la región, que alcanzó números negativos en los peores momentos de la sequía, se mantiene estable con un 11.7% de su capacidad cubierta, a pesar de que la última lluvia registrada sobre la represa tuvo lugar el pasado uno de febrero.