"Europa trata de limitar los suministros del gas ruso, pero actualmente no hay alternativas a este", dijo Kalfin durante su reunión con el jefe del Comité de Asuntos Internacionales del Consejo de la Federación (Cámara Alta del Parlamento ruso), Konstantín Kosachov.
"No es solo mi postura, sino del Gobierno búlgaro; tiene sentido trabajar juntos para garantizar los suministros del gas ruso a Europa en unas condiciones ventajosas para ambas partes", añadió.
En diciembre pasado el presidente Vladímir Putin anunció que Rusia cancela el proyecto del gasoducto South Stream "debido a la posición no constructiva de Bruselas".
La ruta planeada pasaba por el fondo del mar Negro hasta Bulgaria y desde allí hacia otros países balcánicos, Hungría, Austria e Italia.
Como alternativa se propuso construir un gasoducto a través de Turquía y transportar gas hacia el mercado europeo desde la frontera turca con Grecia.