El caso Lava Jato, que empezó a investigarse en marzo de 2014, investiga el desvío de alrededor de 10.000 reales (3.000 euros) de fondos públicos por parte de Petrobras, que pactaba adjudicaciones de obras públicas irregulares y sus correspondientes mordidas con empresas de construcción y ingeniería en un engranaje sistemático de corrupción que se mantuvo durante varios años gracias también al pago a varios cargos políticos.
El presidente del Senado, Renan Calheiros, también habría sido incluido en dicha lista según informaciones publicadas por O Globo el martes. "No recibí ninguna información", se defendió Calheiros de la información según la cual habría sido informado por el vicepresidente Michel Temer de que aparecerá en la lista mencionada.
El mismo diario publica hoy que fuentes del gobierno creen que la postura de Calheiros de no admitir a votación un ajuste fiscal que aumenta la presión sobre las empresas tiene que ver con su presunta inclusión en la lista.
Las crecientes tensiones entre los dos brazos del legislativo y la presidenta Dilma Rousseff dificultan su gobernabilidad en un inicio de mandato marcado por las medidas de austeridad que la mandataria quiere llevar a cabo de la mano de su ministro de Hacienda Joaquim Levy.