"Conversé con el presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, y estoy seguro de que el mandatario purgará el SBU que controla, también creo que las eliminaciones de empleados tendrán lugar en la Fiscalía General", indicó.
Según sus palabras, encargó al jefe del Ministerio de Interior expulsar a funcionarios así como abrir investigaciones en su departamento.
El presidente de Ucrania firmó en octubre pasado una ley de depuración que afecta a los funcionarios del Estado de la época del presidente anterior, Víctor Yanukóvich.
Acorde a la normativa, no podrán optar a puestos directivos los integrantes de la lista de las 100 principales fortunas de Ucrania, ni las personas que hayan ocupado cargo en el Ejecutivo o en la Administración de Yanukóvich ni los que estén implicados en corruptelas o violaciones de los derechos humanos.
El Ministerio de Exteriores de Rusia opinó que esta medida puede ser utilizada para legalizar las persecuciones políticas.