Los inmigrantes intentaron llegar a nado a la costa española cuando fueron repelidos con material antidisturbios por la Policía española y por fuerzas marroquíes.
Quince fallecieron en el intento. Otros 23 lograron alcanzar suelo español, pero fueron entregados "en caliente" a Marruecos sin que mediase proceso de identificación ni se les ofreciese la posibilidad de pedir asilo.
Diversas ONGs, junto con Amnistía Internacional, se personaron en el caso por presunto homicidio por imprudencia. Las organizaciones lamentaron la tardanza con los que se tramitaron estos hechos en los juzgados.
Los juzgados de Ceuta alegaron que la tragedia ocurrió en territorio marroquí, pero la Audiencia Nacional les devolvió el caso el pasado 29 de enero.
El caso siguió su proceso para investigar si hubo causa efecto en la muerte de los cinco emigrantes, cuyos cuerpos se rescataron en suelo español.
El paso fronterizo del Tarajal, en Ceuta, es uno de los más transitados de la Unión Europea, con un paso diario aproximado de 20.000 personas y más de 3.000 vehículos.
También es un paso habitual de los emigrantes sin papeles hacia Europa.