En Siria e Irak, dice la agencia que tuvo acceso a la información, están combatiendo al menos 3.400 ciudadanos de países occidentales. Se informó que unos 150 estadounidenses intentaron penetrar en la zona del conflicto en Siria, sin embargo, parte fueron detenidos en el camino al Oriente Próximo o murieron en los combates.
El número de extranjeros que se dirige a Siria para luchar supera la cantidad de los que se unieron a los guerrilleros en los últimos 20 años en Afganistán, Pakistán, Yemen, Somalia o Irak, escribió uno de los autores del documento, Nick Rasmussen, jefe del Centro Nacional Antiterrorismo de EEUU.
Según sus datos, ciudadanos de al menos 90 países llegaron a Siria e Irak para engrosar las filas de grupos yihadistas.
La organización terrorista EI, conocida anteriormente como Estado Islámico de Irak y Levante, proclamó en verano pasado un califato en zonas de Siria e Irak que mantiene bajo su control.
El grupo se hizo famoso por su crueldad, el asesinato de miles de civiles y la toma de varios miles de rehenes.
EEUU, con la ayuda de sus aliados, entre ellos varios países árabes, comenzó en agosto pasado una serie de bombardeos contra las posiciones del EI.