El órgano federal emitió esa resolución en respuesta a una solicitud de un particular, debido a que la Defensa Nacional declaró su "incompetencia" para conocer la información.
Los militares deberán entregar todos los informes de los hechos sobre la desaparición de los estudiantes que han surgido de testimonios de los sobrevivientes e investigaciones periodísticas.
El pleno del IFAI aprobó por unanimidad "revocar" la respuesta de la Secretaría de la Defensa y le exigió hacer una búsqueda de la información y entregarla al particular que la ha solicitado –vinculado a los familiares de las víctimas o periodistas–, en una versión pública que solamente censure datos personales.
El particular solicitó copia de las fotografías y registros que los soldados del Ejército tomaron el 26 de septiembre a los estudiantes de Ayoitzinapa, en Iguala, con base en el testimonio de uno de los sobrevivientes, Omar García.
El joven estudiante afirma que algunos militares ingresaron a un hospital de Iguala, tomaron fotos y pidieron datos de los estudiantes que llegaron heridos después de los ataques a balazos a dos autobuses repletos de estudiantes.
Los ataques –según la investigación federal– perpetrados por policías y narcotraficantes confabulados por el alcalde de Iguala, se saldaron con seis muertos, 20 heridos y 43 desparecidos, que según la fiscalía fueron asesinados y sus cuerpos calcinados y lanzados a un río, una versión que las familias rechazan.
La Defensa podría estar en dos escenarios, dijo el IFAI: "Uno, no documentó debidamente las acciones que llevó a cabo como parte de su intervención en el hospital (de Iguala), y en las investigaciones subsecuentes; o dos, incumple con su responsabilidad de rendir cuentas y aumenta la desconfianza en las instituciones públicas".
Los familiares de las víctimas afirman que los soldados participaron en la operación que involucró a un centenar de policías y sicarios, pero la fiscalía federal afirma que no hay ningún indicio de participación militar.