El rotativo cita las estadísticas aduaneras, que comparan los índices del diciembre del año pasado con los del mismo período de 2013.
De este modo, las importaciones de whisky se disminuyeron en el 45,5%; de vino, en el 44,2%; de ron, en el 38,4%.
Mientras, las importaciones de coñac y brandy registraron la caída en el 47,8%; las de tequila, 57,1%.
Los importadores de bebidas alcohólicas, encuestados por Kommersant, explican tal reducimiento por la subida del euro y el dólar ante el rublo, que desde el septiembre pasado aumentaron en el 80% y el 58% respectivamente.
El jefe de la compañía de vinos Moro, Dmitri Sirij, indica que por la menor capacidad adquisitiva de los rusos las ventas del alcohol desde inicios de este año cayeron en 30-40%.
"Importamos solo la producción que se vende bien", dijo Sirij.