"He solicitado a secretaría de la Función Pública que investigue y resuelva si hubo o no conflictos de interés en las obras públicas o contratos otorgados por dependencias federales a las empresas que celebraron compraventas de inmuebles con mi esposa, con el titular de la secretaría de Hacienda y Crédito Público (Finanzas) y con un servidor", dijo Peña durante el anuncio del nombramiento del nuevo secretario de la Función Pública, Virgilio Andrade.
Las propiedades que serán investigadas son una mansión de la primera dama de México, Angélica Rivera, valuada en cuatro millones de dólares, en el barrio exclusivo Lomas de Chapultepec de la Ciudad de México, la del secretario de Finanzas en un club de golf del pueblo colonial de Malinalco (200 km al sur) y la casa del presidente en un campo de golf en Ixtapan de la Sal (250 al suroeste).
"En el ánimo de generar plena confianza y transparencia ha hecho esta solicitud", dijo el mandatario en un discurso al designar al nuevo titular de la Secretaría de la Función pública.
La existencia de esas propiedades comparadas a un empresario vinculado a un consorcio chino que ganó un concurso para construir un tren rápido a la ciudad de Querétaro –que el viernes se dio por cancelada definitivamente– ha sido conocida por investigaciones periodísticas
La existencia de la mansión de la primera dama fue descubierta por el equipo de la periodista Carmen Aristegui, corresponsal de CNN y conductora del noticiario matutino nacional MVS, y del diario estadounidense Wall Street Journal, en el caso de secretario de Finanzas, quien recibió un préstamo del empresario.
El mandatario hizo el anuncio junto con una serie de medidas que buscan prevenir la corrupción de los funcionarios públicos.
El objetivo de la medida anunciada es "generar plena confianza y transparencia", tras las revelaciones periodísticas, para combatir la corrupción, como "un problema estructural que entre todos debemos enfrentarlo".
La investigación periodística de Aristegui, financiada por el International Center For Journalists, reveló que la empresa constructora era Grupo Higa del empresario mexicano Armando Hinojosa Cantú, contratista del gobierno.
El equipo de Aristegui reveló que la esposa del mandatario había comprado una mansión a la constructora que ha sido contratista en los gobiernos de Enrique Peña, tanto en su anterior cargo como gobernador del Estado de México, vecino de la capital, y en su gestión como presidente, iniciada en diciembre de 2012.
La primera dama decidió poner en venta la mansión en noviembre, pero poco después el periódico neoyorquino Wall Street Journal reveló que otra casa de descanso le fue vendida al mandatario cuando era gobernador del Estado de México por otro contratista de su gobierno y amigo, favorecido con contratos de unos 100 millones de dólares.
El presidente argumentó que los contratos logrados por el empresario constructor del Grupo Higa no fueron tomados con su participación.