"Siento una angustia increíble por mis colegas, al dejarlos atrás", ha afirmado Greste en la primera entrevista que concede tras su liberación, con Al-Jazeera.
En medio del alivio, dijo, tengo un sentimiento de preocupación y ansiedad. "La liberación debe ser para ellos también", afirma Greste, que abandonó Egipto el domingo.
El periodista australiano y sus compañeros fueron acusados de "difundir noticias falsas y colaborar con los Hermanos Musulmanes", organización declarada terrorista en diciembre de 2013.
La policía los arrestó en un hotel del Cairo ese mismo mes y en junio de 2013, un tribunal condenó a Greste y a Fahmi (con pasaporte canadiense) a siete años de cárcel y a Mohamed, a diez.
Greste ha indicado que su liberación es "un enorme paso adelante" para Egipto y ha expresado su deseo de que el país "siga en este camino" y libere a sus compañeros.
Recordando sus días en la cárcel, Greste ha contado que se propuso estar en forma física, mental y espiritual.
"Hice un gran esfuerzo en tres sentidos: intentar estar en forma, correr en un espacio muy limitado, mantener un programa de ejercicios, conservar la forma mental con el estudio y la espiritual, con la meditación", ha relatado.
Todo esto era una manera de hacerme cumplir una especie de disciplina y enfrentarme a cada día como podía. Y espero, toco madera, no haber salido de esto demasiado dañado, narra Greste.
"No me esperaba [ser liberado] en absoluto, me desperté pensando en la campaña (para pedir su liberación) que teníamos que seguir (…) Fui a correr y el alcaide de la prisión me llamó y me dijo que era hora de empaquetar mis cosas, que la Embajada estaba por llegar", ha explicado Greste.
Sentí una sensación de alivio y emoción, relata, y tensión al tener que decir adiós a mis colegas.
"Cuando uno pasa 400 días en esa cercanía con la gente, llega a conocerla muy bien. Fue un momento realmente difícil caminar y salir de la cárcel, diciendo adiós a esos chicos, sin saber cuánto tiempo más van a tener que aguantar esto", ha dicho el periodista.
Greste cuenta que llegó a conocer y a aceptar a Baher y Mohamed "como familia, como hermanos".
"Mohamed Fahmi es un profesional extraordinario, un periodista dedicado, muy apasionado y un personaje de carácter fuerte. Baher es uno de los hombres de familia más increíbles que he conocido. Si alguien ha sufrido todo esto es él. Tiene esposa y uno de sus hijos nació mientras él estaba la cárcel", ha añadido Greste.