Con la ayuda indirecta del exjugador del Dinamo Moscú, el letrado del despacho londinense Joseph Hage Aaronson superó un crucial obstáculo en la demanda de su cliente, cuando los dos jueces que presidieron la vista decidieron remitir las cuestiones sobre la validez y el impacto de las sanciones al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE).
La Gran Sala de la misma institución se pronunció, en 2005, a favor de Simutenkov en su pulso legal contra la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y el Ministerio de Educación y Cultura.
Esta mañana, Saini no entró en excesivos detalles sobre el historial del jugador moscovita quien, después de fichar por el Tenerife en 1999, fue víctima de la normativa sobre cuotas de extranjeros activos en las ligas españolas.
Pero la victoria de Simutenkov sobre la RFEF sirvió al abogado de Rosfnet para defender en Londres que las restricciones contra la industria rusa son incompatibles con el Acuerdo de Colaboración y de Cooperación con Rusia, firmado en 1994 y ratificado tres años después.
Saini denunció también la "incertidumbre" sobre el alcance de las sanciones para recalcar su invalidez. En este sentido, recordó que "no hay una definición geológica definitiva" del término "shale" (esquisto, según los diccionarios generalistas) y sostuvo que las restricciones en operaciones petrolíferas en "aguas profundas plantean dudas sobre su significado".
Gerry Faccena, abogado del ministerio del Tesoro, alegó a su vez que el "nivel de incertidumbre" sobre el significado de ambos conceptos "no aporta una base suficiente" para invalidar las sanciones que Reino Unido ha decretado en línea con el Reglamento de la UE en la materia.
El juez lord Jack Beatson citó a ambas partes a una nueva vista pública en los próximos días que debería concluir esta fase del pleito en el Alto Tribunal de Londres. El proceso se trasladará después a Luxemburgo, donde el TJUE deberá pronunciarse sobre la validez y efecto de las sanciones que afectan a Rosneft.