"Ucrania se encuentra en un colapso político y económico" y las autoridades del país "siguen sin lograr confirmar su legitimidad", dijo el director del Instituto de Estados Emergentes ruso, Alexéi Martínov.
Estimó también que la integración europea de Ucrania está parada y que las autoridades ucranianas continúan la campaña militar en el este para desviar la atención de la población de los problemas actuales.
"De hecho, estaríamos hablando de terrorismo de Estado", agregó.
El vicedirector del Instituto de Países de la Comunidad de Estados Independientes, Vladímir Zharijin, calificó la política de Kiev de "inmoral".
"Creo que Kiev se comporta de manera inmoral pero en el marco de su táctica y en vísperas de las negociaciones en Astaná intenta acumular argumentos para tener más peso", dijo.
En concreto "les diría que deben cumplir con los acuerdos de Minsk y retirar las armas pesadas", enfatizó.
Mientras, el vicedirector del Centro de Estudios Ucranianos y Bielorrusos, Bogdán Bezpalko, afirmó que Kiev por lo general no está interesado en las negociaciones.
"Primero, Ucrania no es independiente en la toma decisiones y segundo, si hace concesiones reconocerá la legitimidad de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk", explicó.