En cambio, si el presidente norteamericano, Barak Obama, logra levantar o aligerar las sanciones "el vuelco será total" de tal manera que las relaciones entre La Habana con sus actuales aliados, como Rusia o los países bolivarianos, podría cambiar radicalmente.
"Si no se levanta el embargo y no se pone en proceso un cambio económico en profundidad, no creo que las cosas cambien". "No creo que mañana mismo Castro convoque elecciones libres o que vaya a hacer nada que rompa con el status quo actual", afirma el experto.
Para el politólogo, habitual articulista del diario El País, lo esencial de lo anunciado ayer en Washington y en La Habana es que "se establecen relaciones", algo que "para Cuba era una viejísima aspiración" porque así termina "esa sensación de permanente superioridad ejercida por Estados Unidos".
"Esa tutela política y moral que no ha sido eficaz en lo más mínimo y que ha durado más de un siglo". Hoy Cuba por fin "es un país plenamente soberano", destaca Elorza a Sputnik.
El deshielo responde a una necesidad histórica, asegura el profesor que no comulga con la "dictadura de Castro", pero Washington también tiene relaciones con otras muchas dictaduras, "incluso peores" que la cubana.
"Lo más importante a largo plazo es que, por primera vez en la historia, Cuba y Estados Unidos establecen un acuerdo en términos de igualdad desde el siglo XIX". Desde los prolegómenos de la independencia, "siempre había habido un problema de fondo" ya que "ni Cuba fue absorbida por EEUU, a pesar de que había en uno y otro lado políticos y fuerzas importantes que presionaban en ese sentido, ni Cuba pudo afirmarse de manera independiente ni siquiera en el castigo, porque sufría el aislamiento, o en el embargo económico y antes con el bloqueo".
En estas circunstancias, por vez primera, "Cuba y EEUU se van a poder relacionar en términos de estricta igualdad", tal como recordó ayer el líder cubano Raúl Castro.
El catedrático estima que "históricamente" es el aspecto más importante, pero que más adelante este cambio llevará a una mayor distensión en todo el continente americano.
Ahora, todo depende del fin del embargo, un contencioso que Obama "estaría dispuesto a revolver inmediatamente", pero que será difícil de conseguir dada la minoría demócrata que existe en el Congreso estadounidense.
Si esta situación persiste, "Cuba seguirá apegado a aquellas potencias que le proporcionen una relación favorable", un apoyo que, de momento, encontraría en EEUU.
El experto avanza que con la nueva situación las relaciones entre Cuba y Latinoamerica, que ha celebrado la reconciliación entre los dos países, tenderán a normalizarse.
El experto valora muy positivamente tanto la reacción del presidente venezolano, Nicolas Maduro, como el discurso de Castro en La Habana. "Fue excelente".