Más de 270 insurgentes depusieron las armas en las últimas 24 horas en Siria en el marco del programa pacífico para arreglar la crisis en el país, informó este domingo la agencia SANA.
"272 combatientes armados de las provincias de Damasco, Homs, Alepo e Idlib se entregaron voluntariamente a las autoridades", según la fuente.
El Gobierno sirio anunció reiteradamente que todos quienes deponen las armas y se rinden, serán liberados después de pasar una revisión necesaria.
Previamente, se informó que por el período de agosto a septiembre pasado al menos de 800 personas que participaron en los combates por parte de distintos grupos armados decidieron volver a la vida pacífica.
Desde marzo de 2011 Siria atraviesa un conflicto armado que, según la ONU, cobró más de 191.000 vidas.
Las fuerzas gubernamentales se enfrentan a las milicias pertenecientes a varios grupos armados, entre los que destacan el EI y el Frente al Nusra.
