Los observadores rusos que forman parte de la misión especial de observación civil de la OSCE en Ucrania señalan que no todas sus comunicaciones entran en los informes oficiales, declaró hoy el embajador de Rusia ante esta organización, Andréi Kelin.
“Hay casos cuando los observadores, incluidos los que trabajan en Ucrania, proporcionan mucho más información de la que luego aparece en los informes. La parte rusa se dio cuenta de que no todo lo que se comunica luego se publica”, dijo Kelin.
Según el diplomático, los informes de la misión de la OSCE se someten a “esterilización”.
A mediados de abril Kiev lanzó una operación especial contra las milicias en las regiones orientales, dispositivo que causó más de 100 víctimas mortales, según la ONU.
En dos provincias del este, Donetsk y Lugansk, se proclamó la creación de "repúblicas populares" que el 11 de mayo celebraron referendos independentistas y al día siguiente anunciaron la secesión de Ucrania, dejando claro que boicotearán las elecciones presidenciales convocadas por Kiev.