La duración de los enfrentamientos en el este de Ucrania dependerá de las pérdidas del Ejército en la operación especial, opina el presidente de la Academia rusa de Estudios Geopolíticos, coronel general Leonid Ivashov.
“Es difícil de pronosticar cuándo terminarán los enfrentamientos. Las autoridades que la gente rechaza por ilegítimas no pueden ganar una guerra. Pueden conseguir una temporal ventaja táctica, pero no es de olvidar que cada gota derramada de sangre no hace más que alimentar los ánimos de resistencia. Cuando a la lucha se unan decenas y centenares de personas, la correlación de las fuerzas cambiará”, dijo Ivashov a esta agencia.
Según el experto, los acontecimientos en el este de Ucrania demuestran que “la gente no quiere obedecer y está preparada para luchar contra los bandidos a brazo partido”.
“En caso de una fuerte resistencia y si las fuerzas gubernamentales sufren bajas considerables la guerra cesará y el propio Kiev pedirá negociaciones. En caso contrario, hasta si se consiguiese aplastar la resistencia por la fuerza, la guerra no terminaría: la gente tiene armas, quiere vengarse de los muertos, de las viviendas destruidas y a lo mejor optará por una ‘guerra de guerrillas’”, afirmó Ivashov.
Las provincias de Donetsk, Járkov y Lugansk, situadas en el este de Ucrania, desde marzo pasado se han convertido en escenario de protestas a favor de la federalización del país. A mediados de abril, Kiev inició en la región una operación especial con el uso del Ejército para cortar lo que considera un brote de separatismo.
Moscú ha condenado en repetidas ocasiones el uso de la fuerza para reprimir las protestas federalistas.
