Rusia está interesada en prevenir la desaparición de la iglesia cristiana de Siria, declaró la presidenta de la Cámara alta del Parlamento ruso, Valentina Matvienko, al encontrarse con el patriarca de Antioquía, Juan X.
“El éxodo de los cristianos de Siria, si consideramos esta posibilidad, se podría extender a otros países de Oriente Próximo: el Líbano, Jordania o Palestina. Esta situación, en mi opinión sería una catástrofe civilizatoria para toda la región. Rusia se esfuerza para prevenirla”, dijo Matvienko.
Añadió que según los últimos datos, hasta 500.000 cristianos sirios se vieron obligados a huir. En su opinión, la desaparición del cristianismo en Siria amenaza con una “trasformación total del carácter histórico de la región”.
Matvienko sugirió que Damasco debe intentar conservar la coexistencia de diferentes confesiones en el país y agregó que Rusia seguirá esforzándose para el éxito de la conferencia Ginebra 2.
“Ginebra 2 representa el primer paso hacia la paz, es un trabajo duro por continuar el diálogo y buscar una solución pacífica del conflicto”, dijo.
El patriarca Juan X agradeció a Matvienko estas palabras y recordó que la iglesia rusa y de Antioquía se relacionan desde la conversión de Rusia.
“El amor y las relaciones entre nuestras iglesias se conservaron a través de los siglos pasando por diferentes fases”, dijo el jerarca.