Las monarquías del Consejo de Cooperación de los Estados Árabes del Golfo (Pérsico) anunciaron hoy que tomarán medidas contra los integrantes del movimiento libanés chiita Hezbollah.
Las sanciones se extenderán al permiso de residencia en los países del Golfo y a las operaciones financieras y comerciales.
“La participación de Hezbollah en el derramamiento de sangre en Siria muestra la auténtica faz de ese movimiento cuyos propósitos van más allá del Líbano y del mundo árabe”, afirmaron.
En los países del Golfo Pérsico, ricos en petróleo y gas, vive una numerosa comunidad libanesa. Por otro lado, los libaneses, igual que otros extranjeros residentes allí, no suelen exteriorizar su afiliación a los partidos y movimientos políticos.
El líder de Hezbollah, Hasan Nasrullah, reconoció en una intervención que los combatientes de ese movimiento participan en el conflicto armado sirio.
Hezbollah e Irán actúan como los principales aliados del presidente sirio Asad.
Varios Estados del Golfo a su vez apoyan abiertamente a la oposición siria, incluidos sus grupos armados que hacen frente al Ejército gubernamental.
El conflicto entre las autoridades y la oposición continúa en Siria desde marzo de 2011 y ya se cobró más de 80.000 vidas, según datos de la ONU.