El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, afirmó este lunes que la solución a la crisis siria pasa por la renuncia del actual presidente del país árabe, Bashar Asad.
“La dimisión del actual presidente de Siria, Bashar Asad, es la solución a la crisis interna siria”, manifestó Van Rompuy tras una reunión en El Cairo con el secretario general de la Liga Árabe, Nabil al Arabi.
Según el jefe de la Unión Europea, los Veintisiete apoyan plenamente al enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Lakhdar Brahimi, en sus esfuerzos para “encontrar una solución política al conflicto”.
En este sentido, es muy importante que la recién creada Coalición Nacional de las Fuerzas de la Revolución y la Oposición Siria (CNFROS) colabore con el mediador internacional y su equipo, indicó Van Rompuy, quien mantuvo este lunes una entrevista con el presidente egipcio, Mohamed Mursi, tras llegar la víspera a El Cairo.
Entretanto, Moscú volvió a rechazar el domingo el planteamiento de que el presidente sirio deba marcharse como condición previa para el proceso de paz en el país. Según argumentó el ministro de Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov, exigir la renuncia de Asad costaría más vidas humanas en lugar de frenar el derramamiento de sangre.
“Los que apoyan esta opción deben responder por ello”, acotó el canciller ruso, insistiendo en que todos los actores externos “interesados en salvar el máximo posible de vidas de los sirios” deben alentar a las partes del conflicto a que pongan fin a la violencia y se sienten a la mesa de negociación para consensuar el contenido y los plazos de la transición.
Desde marzo de 2011, Siria vive un violento conflicto armado que ha causado, según datos de la ONU, al menos 60.000 muertos y más de 600.000 refugiados.
