Las autoridades de París tomaron la decisión de “reducir provisionalmente” el número de sus ciudadanos que se encuentran en la legación diplomática gala en Teherán como “medida de precaución” a raíz del ataque a la embajada británica en la capital de la República Islámica, informaron hoy agencias.
Según la prensa, la medida afectará a una parte del personal diplomático francés y a los familiares de todos los cargos oficiales galos que se encuentran en Teherán que deberán abandonar la capital iraní en los próximos días.
Numerosos jóvenes iraníes celebraron a finales de noviembre una manifestación de protesta ante la sede de la misión diplomática del Reino Unido en Teherán, luego irrumpieron en el edificio, arrancaron y quemaron la bandera y saquearon la documentación.
El Consejo de Seguridad de la ONU, así como Moscú, Washington, París y Roma, condenaron el ataque.
Las relaciones entre Londres y Teherán se hicieron más tensas, después de que el Reino Unido impusiera nuevas sanciones financieras contra Irán tras la publicación del informe del OIEA (Organismo Internacional de Energía Atómica) sobre el programa nuclear iraní.
Las autoridades iraníes redujeron las relaciones diplomáticas con Londres al nivel del encargado de negocios, lo que prevé la retirada de embajador británico desde el territorio iraní en un plazo de dos semanas.