El abogado y bloguero Alexéi Navalni, conocido por sus denuncias de
corrupción y críticas al Kremlin, fue acusado de haber tramado
la sustracción de madera por unos 500.000 dólares a la empresa estatal
Kirovles. Un tribunal de Kirov le condenó a cinco años de prisión y unos US$15.000 de multa. Más tarde Navalni fue puesto en libertad bajo el compromiso de no abandonar el país hasta la firmeza de la sentencia.