"Las acusaciones del régimen de Kiev de que las Fuerzas Armadas rusas presuntamente atacaron un mercado en el centro de [la ciudad de] Sumi y otras zonas pobladas el 15 de agosto constituyen un ataque de falsa bandera deliberado, destinado a crear un ambiente mediático negativo para perturbar las próximas negociaciones ruso-estadounidenses en Anchorage", destacaron desde el organismo.
Las Fuerzas Armadas rusas no atacaron Sumi ni otras ciudades, agregaron.
Anteriormente, desde el ente castrense advirtieron que Ucrania estaba preparando ataques de falsa bandera para interrumpir la cumbre entre Rusia y EEUU. Precisaron que las fuerzas ucranianas planeaban un ataque con drones y misiles contra un barrio densamente poblado o un hospital.