Promesa: si Ucrania ataca central nuclear de Kursk, Rusia dará “respuesta militar severa” inmediata

El pasado sábado la Cancillería rusa informó que Kiev ha comenzado los preparativos para un ataque contra la central nuclear de Kursk. La portavoz de dicha cartera, María Zajárova, declaró: "Hacemos un llamado a las organizaciones internacionales, especialmente a la ONU y al Organismo Internacional de Energía Atómica [OIEA], para que condenen de inmediato las acciones provocadoras que prepara el régimen de Kiev y eviten una violación de la seguridad nuclear y física de la central nuclear de Kursk, que podría provocar una catástrofe a gran escala en Europa”.

Al respecto, el Ministerio de Defensa de Rusia advirtió en un comunicado que "en caso de que el régimen de Kiev comience a aplicar sus planes criminales destinados a crear una catástrofe" de contaminación radiactiva de vastos territorios del continente, Moscú adoptará "inmediatamente medidas de respuesta militar y técnico–militar severas". La nota advierte que el objetivo de esta provocación es acusar a Rusia del atentado y de crear motivos para ataques contra las instalaciones nucleares en Ucrania.

"Consideramos que esas acciones del régimen de Kiev, apoyadas por los patrocinadores occidentales, constituyen una violación directa y clara de la Convención Internacional de la Lucha contra los Actos del Terrorismo Nuclear, aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 13 de abril de 2005", añade el texto.

“Si efectivamente se produjera un ataque de las fuerzas ucranianas contra las centrales nucleares, sea la de Kursk o la de Zaporozhie, o cualquier otra que produjera una catástrofe nuclear, el reactor se quedaría abierto, destruido, y por lo tanto, habría un escape de una nube radioactiva que afectaría a territorio ruso, pero también a territorio europeo, en función de los vientos y la climatología y demás”, explica al respecto el director del Instituto Español de Geopolítica, Juan Aguilar.

“Eso sería un daño a los países europeos, a la población europea, que no creo que estén dispuestos a soportar por seguirle la tónica a un dictadorzuelo loco que está en Kiev. Pero es que, además, Rusia lo podría interpretar como un ataque nuclear. Es decir, no has utilizado un arma nuclear porque no la tienes, pero me has provocado los efectos de un arma nuclear con un escape radioactivo. Con lo cual yo creo que esto es muy difícil que se lo puedan consentir a Kiev”, apunta el analista.

“Aquí la otra cuestión: es cómo Rusia está alertando de esto, y la organización internacional encargada de supervisar y de promover la seguridad nuclear, no está haciendo nada porque está secuestrada por las potencias de la OTAN. Y estamos hablando del Organismo Internacional de Energía Atómica, dirigida en estos momentos por un personaje, Rafael Grossi, quien al parecer es el único en todo el planeta que no se entera de quién está atacando las centrales nucleares. A pesar de que tiene inspectores allí en la central nuclear de Zaporozhie permanentemente, no se entera de dónde vienen los obuses, ni los cohetes, ni los drones. Él no se entera de nada. Todo para no señalar públicamente al régimen del dictador Zelenski. Porque si lo señalara desde una organización internacional dependiente de Naciones Unidas, evidentemente ante la opinión pública mundial y ante muchos gobiernos, lógicamente se echarían las manos a la cabeza y dirían: ‘oigan, detengan ustedes a ese señor”, subraya Aguilar.