A 77 años de que el entonces secretario de Estado estadounidense, George Marshall, anunciara el programa para la reconstrucción de Europa, la jefa del Comando Sur de EEUU, Laura Richardson, abogó públicamente por la implementación de un nuevo Plan Marshall aunque, esta vez, con América Latina como destinatario y con China y Rusia como amenazas.
Durante su participación en el Foro de Seguridad de Aspen, la jerarca militar estadounidense aseguró que China y Rusia están "aprovechando" los problemas económicos que muchos países latinoamericanos arrastran desde la pandemia de COVID-19, al ofrecer programas de colaboración económica que, según ella, opacan lo ofrecido por Washington.
Según Richardson, los líderes latinoamericanos "no ven lo que el equipo de EEUU está trayendo a los países" en materia de inversiones, dado que "todo lo que ven son las grúas chinas y todo el desarrollo y los proyectos de la Iniciativa de La Franja y La Ruta".
La militar estadounidense dijo que las
inversiones chinas en América Latina le provocan "sospechas", debido a que se dirigen hacia "infraestructura crítica" de los países como
energía, 5G, espacio, ciberseguridad e infraestructura de puertos de aguas profundas, rubros que, según ella, podrían
"convertirse rápidamente en aplicaciones militares" al servicio de China.Para Richardson, Washington no cuenta actualmente con herramientas que puedan competir con La Franja y La Ruta. "Creo firmemente que necesitamos un Plan Marshall para la región o una ley de recuperación económica como la de 1948, pero en 2024 o 2025", sostuvo.
El experto consideró que Richardson, que asumió su cargo en 2021, comenzó a tomar consciencia de que "lo que necesita América Latina es paz, inversiones y empresas que generen trabajo", algo que los países latinoamericanos han encontrado en
La Franja y La Ruta, el
programa chino destinado a financiar este tipo de obras en el mundo.
También consultado por Sputnik, el analista venezolano Sergio Rodríguez Gelfenstein apuntó que la alusión a un programa implementado a mediados del siglo XX puede comprenderse en la medida en que EEUU "está retomando conceptos como el Plan Marshall y la Guerra Fría porque tiene que recurrir a instrumentos que fueron exitosos en el pasado, en medio de una crisis actual de su política exterior".
Rodríguez Gelfenstein recordó que si bien el Plan Marshall fue presentado como un programa de ayudas económicas, en el fondo fue "la manera que encontró el establishment estadounidense para comprar Europa" y asegurar que no hubiera un avance de la influencia de la Unión Soviética. Según el analista, los efectos de ese plan pueden verse en que en la actualidad "Europa ha desaparecido como actor internacional" y solo se muestra "sujeto a las políticas de EEUU".
A los ojos de Rodríguez Gelfenstein, Washington "necesita polarizar" las relaciones internacionales, instalando nuevamente una hipótesis de Guerra Fría que es rechazada una y otra vez por China y Rusia. Esta polarización es, de acuerdo al analista, la única manera en la que Washington puede intentar acallar el surgimiento de "voces independientes desde el sur global" en el marco de un "mundo multipolar" que no detiene su crecimiento.
En una línea similar, Riom apuntó que "está teniendo pérdidas en todos los escenarios en los que está jugando", ya que, además de la falta de éxito en el conflicto en Ucrania, Washington ha perdido pie ante China "como mediador en los principales conflictos del mundo".
El analista venezolano añadió, en esa línea, que
muchos de los organismos multilaterales que crecen en el mundo, como los BRICS, la Organización de Cooperación de Shanghái o el Banco Asiático de Inversión en Infraestructura,
ya no cuentan con EEUU o la OTAN como miembros.
Además, mencionó que este nuevo sistema internacional no garantiza derecho a veto o excluye a países africanos y latinoamericanos, como sucede en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. "El mundo que está surgiendo se parece más al mundo real que el del final de la Segunda Guerra Mundial, que está feneciendo y es totalmente anacrónico", concluyó.